Si están leyendo esto probablemente hayan sufrido, o peor
aún, sufran síntomas como dolores de cabeza constantes, llegando incluso a
soportar jaquecas horribles, dolores musculares, fatiga crónica, náuseas y
falta de apetito entre otros. Estarán hartos de ir deambulando de consulta
médica en consulta médica mientras os cuentan que ‘todo está bien’. Todo está
bien aparentemente pero en realidad los síntomas nombrados antes no
desaparecen. Es más, van a peor. Soy una persona de 25 años y he convivido con
estos síntomas desde hace más de 15 años. Hasta que hace un mes oí hablar de la
histamina casualmente.
Pensé en probar una dieta baja en histamina durante unas
semanas, quizá un par de meses, y busqué información al respecto. Los
resultados los noté desde el primer día. Al principio pensé que ese día la
mejoría fue de casualidad, evidentemente. Siguieron pasando los días, semanas e
incluso el primer mes y únicamente he tenido un día dolor de cabeza. Eso sí,
mucho menos leve y coincidió con que tenía un examen importante que llevaba
preparando varios meses.
El cambio que estoy experimentando no se puede resumir en
unas líneas y, como he visto que hay tan poca información al respecto, tome la
decisión de crear un blog personal para contar qué cambios estoy aplicando para
realizar una dieta baja en histamina y ayudar a quienes sufran lo mismo que me
ha tocado pasar. En este blog les escribiré acerca de la histamina, añadiendo
recetas así como productos concretos que creo que se pueden tomar (hay que
buscar mucho puesto que aunque haya alimentos que se puedan tomar, los
productos suelen venir con muchos aditivos que no deberían ser válidos en una
dieta baja en histamina).
Otro tema que quiero contarles: no soy médica, enfermera ni
tengo conocimientos acerca de la salud, así que lo que les cuento aquí deberían
tomarlo como una experiencia personal, pero si tienen pensado seguir una dieta
de este tipo les recomiendo encarecidamente que hablen con su médico y con su
nutricionista. Esta dieta restringe muchos alimentos y hay que tener cuidado
con tomar todas las vitaminas y nutrientes necesarios para el cuerpo, así como
alcanzar una cifra de calorías correcta.
Esto no es una dieta para adelgazar, no es una dieta milagro
ni nada por el estilo. Se trata de curar nuestro cuerpo, en caso de que
la histamina nos esté sentando mal. Por tanto, si no tienes ninguno de los
síntomas que he contado y que contaré en los próximos días, no te recomiendo
esta dieta. Algunas de las restricciones de esta dieta son eliminar el alcohol
y el tabaco, los productos procesados, los productos ultracongelados, el café,
la bollería industrial, el pan (te contaré recetas de cómo hacer tu propio pan)
y prácticamente cualquier cosa que tenga aditivos y conservantes en las
etiquetas (los famosos E´s que aparecen en los ingredientes). Hasta aquí
supongo que era lo esperado, pero también hay que eliminar embutidos, queso,
espinacas, garbanzos, yogures, e incluso cítricos como la naranja. Plátanos y
fresas, tampoco se pueden comer. Parece un panorama desolador pero, si sigues leyendo, es que
estás realmente interesad@ lo cual querrá decir que, por desgracia, estás hart@
de padecer los síntomas anteriores.
En tal caso, te invito a que pruebes esta dieta durante
alguna semana o algún mes, haciendo una visita tanto a tu médico como a tu
nutricionista. En este blog te iré contando recetas y productos que estoy
tomando y te contaré las cosas que vaya investigando sobre la histamina, así
como contándote mis experiencias personales y cómo está cambiando mi vida.
Te invito a que me sigas en mis redes sociales:
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