En esta entrada he pensado en hablar sobre la capacidad del ser humano de luchar por algo. En concreto, cada vez es más frecuente el querer algo aquí y ahora. Lo relacionaré un poco con la temática del blog, sobre todo en el sentido en que para llevar a cabo una dieta baja en histamina se necesitan hacer muchos "sacrificios".
Lo queremos todo aquí y ahora
Recuerdo hace unos años cuando las conexiones a Internet eran más lentas que ahora. Con suerte, se disponía de línea ADSL. Si disponías de una velocidad de descarga de 120 KB/s, eras una afortunada. Para descargar capítulos de cuarenta minutos de duración, recuerdo que tenía que esperar unos 50 minutos aproximadamente. Si descargabas el segundo capítulo mientras veías el primero, aun así tenías que esperar unos minutos para ver el siguiente, puesto que no se había terminado de descargar. Por no hablar de descargar un juego. Hoy en día, gracias a la fibra óptica, descargamos más capítulos y más películas de las que vemos después. Y tenemos juegos descargados que ni hemos probado ni, probablemente, probaremos.
Adelgazar de forma rápida en unos días
Como dicen en mi pueblo, estar a plan. Para adelgazar, básicamente, se trata de no comer. Y si has adelgazado haciendo ejercicio y comiendo mejor, como ha sido mi caso, es que estás muerto de hambre. Pues no, no estoy muerta de hambre. De hecho, ahora con la dieta baja en histamina, estoy comiendo como una leona y aun así estoy bajando de peso. Lo que pasa es que, en el fondo, lo fácil para bajar unos kilos es dejar de comer, adelgazar esos kilos (de líquidos y músculo más que probablemente) de manera rápida. Y luego, en unos días, volverá nuestro querido efecto rebote. Aquí, lo complicado es mantener un cambio de hábitos. Mantener un estilo de vida que sea asumible y llevadero para siempre, y bajar de peso poco a poco. Los resultados, haciendo las cosas bien, acaban llegando.
"La dieta baja en histamina es que requiere muchos sacrificios"
Pues si esta dieta requiere muchos sacrificios para ti, probablemente, es que no estés sufriendo ninguno de los
síntomas de la histaminosis. Si no lo estás sufriendo, no te recomiendo esta dieta. Pero si, como en mi caso concreto, llevas 15 años con migrañas y ni siquiera te puedes tomar un zumo de naranja porque te entran ganas de vomitar o tienes un dolor de barriga horrible pues, qué quieres que te diga, pasar más rato en la cocina, gastarte más dinero en la cesta de la compra y dejar de comer ciertos alimentos que te estén sentando mal, sinceramente, no creo que sean sacrificios. El tema económico puede ser complicado si te cuesta llegar a fin de mes. Pero la gran mejoría que se ha producido en mi calidad de vida hace que todo esto valga la pena sin dudarlo. Hace unas semanas me contactó una persona para preguntarme por esta dieta y para saber si de verdad ha mejorado tanto mí día a día. Me comentó esta persona que va a probar una solución de dióxido de cloro para reducir sus síntomas y que, si esto no le funciona, entonces ya "se armará de valor" para empezar esta dieta.
Conclusiones
Como se suele decir, quien algo quiere algo le cuesta. Esta persona ha recurrido al camino fácil, tomarse una pastillita, tomarse una poción mágica o hacer esa dieta milagro que nos solucione los problemas rápidamente. La pregunta que deberíamos hacernos en este caso sería, ¿prefiero tomar una pastilla varias veces al día durante el resto de mi vida (que a lo largo de los años puede traer problemas secundarios), o quito algunos alimentos de mi dieta aunque conlleve a estar más tiempo en la cocina? Espero que a esta persona le sirva su remedio mágico. Si no es así, aquí estaré encantada de darle ánimos y de indicarle nuevas
recetas bajas en histamina así como
productos que pueden comprar en el supermercado. El truco para ser consistente en el día a día está en disfrutar de todos y cada uno de los pasos que se van dando durante el camino, y no solo del momento de cruzar la meta.
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